Algunas reflexiones en frío después de lo de anoche:

Para mí, una derrota muy diferente a la de otros años. Por las circunstancias que rodean al club en clave institucional y de pandemia. Sin público, en mitad de una transición y con bastantes lesionados, aunque no es excusa.

Lo de ayer duele porque parece que ya es costumbre, y que nos tendremos que conformar eternamente. Duele porque vemos que con el mejor de la historia, hemos tirado más de 8 años en Europa. Duele porque veíamos de lejos el problema y algunos no quisieron darle solución.

Pero dentro del dolor, creo que estamos más cerca de salir que de repetir. Hay jóvenes y hay que asentarlos. Ansu Fati, Pedri, De Jong, Riqui, Konrad, Dest, Araújo. Está la cantera, que tiene buena base también. No es lo de otros años, que siempre salían en la foto a los mismos.

Duele por Messi, que parece quedarse sin argumentos para renovar, aunque precisamente esos son los argumentos: los jóvenes. Son los únicos que pueden hacerle ver que su final puede ser digno y terminar ovacionado cada vez que pise el Camp Nou. Nos lo merecemos. Se lo merece.

Si Messi decide irse, el panorama cambiaría mucho, porque es decisivo en cada decisión deportiva que se tome. Pero ya se iría el líder de una etapa de más de 15 años. Ya volveríamos a pelear con toda una nueva generación sin experiencia, pero con ambición.

Y entonces habría que tener más paciencia que nunca. Habrá que ser consciente de que no tienen la pelota en el tejado, porque están empezando la casa desde abajo. Caminos donde deberán errar para aprender. Caminos que deberemos de perdonar, como hicimos siempre. Somos fieles.

Lo de anoche fue duro, pero diferente. Siento que algo está cambiando, aunque queda mucho por cambiar. Siento que ahora es el momento de pensar en oportunidades. Siento que el futuro es prometedor, y que habrá que ser muy cautos y acertar con cada decisión, o se hará muy largo.

Pensad que después de lo que hemos vivido, nada peor puede venir. Que el Barça también las ha pasado malas, pero siempre se ha repuesto con mejores. Lo que está claro es que esta temporada la preveíamos así antes de empezarla, y esta mentalidad es lo primero que hay que cambiar.

Démosle oportunidades al futuro, y seguid aquí. Criticad constructivamente, y no desde el calentón, en el que también me incluyo. Criticad sabiendo que el margen de mejora es infinito, el mundo no se acaba. No bajéis los brazos ahora que vuelven chispazos de luz, pese a todo.

Estoy seguro de que disfrutaremos de la nueva generación, y de que el presidente que entre, lo hará bien, aunque la responsabilidad sea máxima. Nos jugamos mucho, pero recordad, el partido no se acaba hasta el 90, y si morimos, que sea con las botas puestas.

Visca el Barça